16 noviembre 2017

Lo que hay que leer!!



La dirección del banco de España represalió a un inspector por sus informes “incómodos” sobre Liberbank

El sindicalismo del régimen se moviliza contra el cierre de oficinas en Asturias….del Banco Sabadell (de los cierres de Cajastur/Liberbank, ni hablar)

Lo que hay que leer!!

 “Por lo general, en los periódicos,
 salvo alguna esquela todo son malas noticias”

La lectura de prensa es una adicción perniciosa a la que difícilmente podemos hacer frente, a pesar de todos los pesares. Más terrible aún en Asturias y mucho más si se tiene una visión crítica, apegada a la realidad y enfrentada a la monumental estafa que supone la privatización/liquidación de Cajastur y a la vomitiva campaña de autobombo financiada con dinero de todos, promovida, desde hace muchos años, por la alta dirección de Cajastur y acogida con un entusiasmo perfectamente descriptible (a tanto el aplauso) por los entramados económicos, políticos, sindicales y mediáticos que, para nuestra desgracia, hacen y deshacen en Asturias.

Hoy, la lectura de la prensa nos depara un par de noticias que es conveniente analizar con un poco de detenimiento.

Por un lado, escondidas entre la letra pequeña de una información amplia sobre las presiones de la dirección del Banco de España sobre sus inspectores para que “tengan cintura” (quiera esto decir lo que quiera decir, aunque en todo caso el mal olor es evidente) a la hora de elaborar los informes acerca de la real situación de las entidades bancarias, nos encontramos con las declaraciones de uno de dichos inspectores que manifiesta “haber sufrido represalias de altos directivos del supervisor por sus informes incómodos sobre Liberbank”(El País): “El jefe de grupo no estaba cómodo con mi informe sobre Liberbank y me apartaron por no tener cintura” (El Mundo)

A la espera de los titulares de mañana en primera página acerca de esta alarmante información (no nos llaméis ilusos porque tengamos una ilusión), cabe preguntarse si no va siendo hora de que quienes tienen la obligación de controlar la gestión de los directivos de Liberbank se pongan manos a la obra y cabe preguntarse también si no es hora de que la Fiscalía analice toda esa contabilidad creativa que llevamos soportando desde hace años (y que alcanza niveles de cinismo difícilmente tolerables en 2013, cuando la dirección de Liberbank presenta el mismo día dos informes diametralmente opuestos, uno para los inversores en los que la situación era absolutamente paradisiaca, gracias obviamente a la magnífica gestión del consejero delegado, y otro para justificar el ERE fraudulento en el que se describía la ruina inminente del banco si no se nos aplicaban los brutales recortes salariales que fueron posteriormente anulados en base a la demanda de la CSI).
Por otro lado, también cabe señalar la noticia que recoge el apoyo de CCOO y UGT a las legítimas protestas de los vecinos de diversos pueblos de Asturias por el cierre de las oficinas bancaria de dichos pueblos.

Por un momento, creímos que los argumentos de la CSI, repetidamente expuestos en circulares y en numerosas protestas, habían convencido a los sindicalistas del régimen de Cajastur/Liberbank y, en el colmo del entusiasmo, llegamos a pensar que tal vez estaban dispuestos a abandonar su cansina actitud de firmar todo lo firmable y de apoyar, con un empeño digno de mejor causa, el proceso de privatización/liquidación de nuestra Caja y sus consecuencias para trabajadores y clientes.

Cuando ya estábamos preparando la celebración por la vuelta de los hijos pródigos descarriados en los despachos burocráticos y en la complicidad con la dirección, tal y como la biblia nos enseña, nuestro gozo en un pozo (profundo y amargo): el apoyo de CCOO y UGT se refería solamente a las protestas por el cierre de las oficinas del Banco Sabadell.

Sobre la liquidación de Cajastur, punto en boca, para no perder la costumbre.

Lo dicho: hay años en que no apetece madrugar para leer la prensa.

Pero, por nosotros que no quede: a seguir en la pelea, por la cuenta que nos trae a todos.

16 de noviembre de 2017